27/6/11

VOLVÍ A SOÑAR QUE VOLVÍAS

Isabel Dávila Pereira

Mis fuerzas entre sí se asesinan
Cuando tu mirada lo ordena
Las ventanas gritan y lento explotan
Cuando tu voz lo manda

Esta princesa hacia ti corre
Como si fuera tuya
Pero llega ella, te socorre
¿Y la conviertes en tuya?

Pero, ¿a quién llamo princesa?
¿A aquella cobarde que huyo?
Dime, ¿a quién llamo princesa?
¿A aquella que te quiere suyo?

Bailo con el silencio
Me ha mostrado la melodía de tu voz
Converso con la soledad
Me ha contado que te extraño

Protégeme, choco contra tus ojos
Sumergida en sangre, mi cabeza gira
Amor mío, cubierto en tonos rojos
Mi mente difumina tu mirada, una droga adictiva

Me envuelves en este veneno letal
Mi cuerpo se empieza a desplomar
Hemos sentido esto antes, tan real
Caer en ti, mi alma a ti amarrar

Dime que no escribirías otro capitulo
Que no deseas ni un solo segundo
Que nuestro amor siempre fue nulo
Que no nos sueñas juntos en este mundo

Ya no te quiero extrañar
Nunca jamás tu voz escuchar
Mas mis manos se pierden en ese piano
Que solo tocaba lo mágico de lo cotidiano

Y si cito a un cantante
“Olvídame tu que yo no puedo”
Y si cito a un artista
“Pues no quiero su check out”
  
Aquí me siento a esperar
Mientras se empañan mis sueños
En el sillón donde te solía amar
Donde las llamas me envolvieron

Cuando tus mentiras desvanezcan
Realiza tu check in
Cuando tus ansias te arrebaten
En el numero 8 de mi hotel

¿Quién me dijo que te debía desear?
¿Quién me dijo que te debía extrañar?
¿Cuántas veces te volví a amar
Con solo unas horas mirar?

Y te lo ruego
Si por mí al menos sientes piedad
Te lo pido
No me vuelvas a abrazar

Ni en tus sueños debo vivir
Aunque sin ti yo no duerma
Y sentir tu piel contra la mía
Mientras tu roce desaparecía

Doy vueltas en la cama
Hasta conciliar el maldito sueño
“Buenas noches, soy aquella que te ama”
¡Despierta! Se ha ido tu dueño

Maldito ladrón de amor
Hurtas de mi toda razón
Yo la actriz, tu el director
Y ordenas a mi corazón

Volví a conversar con mi locura
Que en la noche envuelve mi inconsciente
Volví a soñar que volvías
Que nuestros pechos se reunían

Doy paso a mi esquizofrenia psicosomática
Porque solo así te tengo
Bienvenido querido psiquiatra
¿Me acompaña al manicomio?

Casa desvanecida, todo esta roto
El peligro irresistible de quererte 
Esta vez el silencio será mi voto
Ya no puedo detenerte

Miro a lo lejos, un futuro familiar
Un puñado de estrellas y alegría
Anhelo este momento retratar
A Benedetti le pregunto, si es posible todavía

Un homicidio a mi cordura
El horizonte tan profundo
El preferir esta locura
Mientras en tus labios me hundo

26/6/11

DESPEDIDA A LA AUSENTE

Miguel Molina Díaz

Amanece a través de la ventana
y pienso en que hace poco te vi a lo lejos.
La brisa helada del alba me congela
y es como tocar tus manos diminutas
mientras escucho a un gallo
anunciar el nuevo día.

Los rayos del sol me iluminan.
Ya no hay oscuridad. Solo silencio.
La evidencia de tu ausencia
me hace rememorar la blancura
de tu espalda infinita.
¿Y tu cintura? ¿Y tus muslos?
¿Y esa mirada tuya que no
he vuelto a ver desde aquel ocaso?

El amanecer me lo comprueba:
no volveré a besar tu frente.
Pero guarda, infinita,
los besos que te di.
Y toda esa poesía de fuego
que, iluso y espontaneo, te dediqué.
No puedo despedirme de ti.

Parto a tierras muy lejanas
para recuperar la ilusión
y no sé si volveré.
Me duele dejar en tu piel
la mitad de mi vida.
Me duele no haberme despedido
de tu presencia pero tu ausencia
confirma tu paso por mis ojos.

Adiós montañas verdes
y cordilleras en que te soñé.
Dejo atrás los lagos en que
te reflejabas desnuda y lisa.
No volveré a ver tus senos,
cálidos y vastos,
en donde reconfortaba mis deseos
y tus pezones frutales
no socorrerán más mi cuerpo solitario.

Dejo esta ciudad de convento
que me negó la posibilidad de tu mirada.
Las funestas iglesias coloniales
no sabrán nuevamente del poeta
quién recorrió los confines del mundo
para traerte un rosario y un collar,
que probablemente ya perdiste.

Antes viajaba despedazado
y con tu nombre impregnado en mis labios.
Ahora no te llevaré conmigo a donde vaya.
Te dejo. Salgo sin remedio de tu vida.
Solo Borges me recordará
que aún existes en algún lugar.
Ojala vuelvas a volar un día.
Ojala alcances con felicidad los sueños maravillosos
en los que nunca me incluiste.

El día es absolutamente caluroso
y el cielo azul está despejado.
Pronto partiré a lejanas tierras
para encontrarme con mi futuro.
Te dejo mi último destello de esperanza.
Y una vez más, frente al horizonte,
pronuncio, por última vez, tu nombre.
Adiós, ausencia de mi vida.

23/6/11

Esta noche


Esta noche ya descansa despejada.
Las nubes desaparecieron,
las estrellas se mudaron
solo queda el silencio y una luna amplia.

En noches como esta te pienso
y suspirando espero que la dicha
de la despejada noche
te brinde los mismo pensamientos.

Solo la luna nos acompaña
brillara toda esta noche
como nuestra pasión brillaba.
La luna fiel nunca nos dejaba.

No, la luna, nunca abandonaba,
ni cuando me encuentro solo en la noches que la pienso,
ni cuando espero que te acompañe en tus pensamientos.

En estas noches el aire tiene, tu, esencia de pena
mientras más respiro, más te recuerdo.
Suspirando revives en esta noche
y te difundes entre los sentimientos. 

No te siento cerca
solo están los recuerdos. 
Pero espero que tu me sientas,
aunque por instantes en tus pensamientos. 

La melancolía es lo que pasa
y una a una recorre las venas.
Con los ojos ácidos te espero.
Y espero que aun me quieras.




Pietro Marsetti

20/6/11

EXTRAÑEZ

J.S. Castel

Extraña sensación, momento incómodo
vieja amiga
a que has venido?
me mostraras esta vez tu rostro?
o vienes a jugar al escondite
Por las cisuras de mi mente

Recordemos que lo nuestro
ya ha terminado
que solo has dejado muros despintados
copas rotas, consciencias vacías
disdiacocinesias en mi actuar
espíritus lastimados
cuya sangre emana en la habitación
en una suerte de ruleta se decide
quien se queda y quien sale
caos regentor que pretendes
con esta sangre estancada?

Sangre que no arde, demonios!
si tan solo un poco de escozor
un aviso, un umbral de ese grial llamado dolor apareciese
y me liberase del vacío que representa el no sentir el no confiar
el de creer en los buenos pero no en el bien
el de saber del cielo pero encontrar tus alas cortadas 

Pero ya no estás
miles de personas fuiste
recién me di cuenta
y sin embargo necio pensar 
me arrastra a imaginar que en algún lugar te escondes 

Es acaso en ese momento que parece que ríes y no
o es tu voz aquella que navega
como río por mis conductos auditivos
que los inundan mejorándolo todo, así de pronto
es inútil no importa que digas
conozco la verdad con solo el tono de tu voz
la profundidad necia de tu alma es un libro abierto a leerse
no te das cuenta que hace tiempo descubrí tu simpleza
tu baja psiquis tus sueños pretenciosos
engañosamente amalgamados con lo sublime 
deja ya de tocar el cielo, deja ya de hablar con los árboles
para de mirar el mundo con ojos de ángel 
ya no eres tú ya no soy yo

18/6/11

Miaradas #2

Pietro Marsetti

Verte, entonces, dejo de ser la profesión de tu belleza.
Fue sacar una foto, para que estés en el presente de mis pensamientos.
Mirarte es mas que recordarte cuando en la soledad
las sombras cosechan tu olvido
el recuerdo de tus pupilas como faros, iluminan. Estoy contigo.

Mírame y que no sea por devolverme el gesto.
Mírame al pasar lento, para confirmar con mirada
la pasión que yace en el alma, desesperada.
Por los ojos saldrá a tocar la puerta de tu corazón
para dejarte contagiada.

Serian de esas cosas que por palabras no te digo
ni el verso mas pensado o adornado de los mejores verbos lo diría.
En duda tengo fe en que mi mirada lo haría.
Verte cuando cruzas el mismo camino, dejando que el tiempo tome su pausa,
mientras la boca se reseca y el frío asienta en la piel nervios congelados
es cuando se padece de abrazos de fuego y besos de mar.

La fe, después del encuentro, espera ser escuchada
espera que tu mirada te diga que busco lo que quieres encontrar.

Y hay de los que creen que las miradas
no dicen nada.
Qué pueden decir las miradas
cuando no están enamoradas.
Qué se puede decir cuando si lo están,
no son una, son miles que se cruzan esperando ser escuchadas.

Mirarte es estar vivo o muerto
se siente que el aire también abraza
los ojos cerrados y el cuerpo tieso
si existen tus labios.

Al ver todas las noches la noche y su luna
Recuerda que se fue el sol y solo queda aun, dos llenas: Dos lunas.

Abriendo el portal del infinito, la entrada a tu cielo.
Las ventanas a lo físico de tu alma,
el paisaje del bosque de tu piel.
Mírame, miradas, poco a poco se apagan
y quedan las palabras no dichas convertidas en besos.

13/6/11

ELLOS

Monserrate Quezada


Ella lo esconde y a la vez
lo niega, mientras Él
en la tormenta
con recuerdos navega

Y míralos como se alejan
¿Acaso no saben lo que dejan?
con cada paso que ella da
Él solo se vuelve a resignar

En ese intento de realidad
juntos caminaban en dirección al mar
las palabras ya habían cesado
pero las miradas como en el pasado
ya se habían reanudado

Pero vuelven a este mundo
y sienten, tocan, ven
eso que lo transforma
donde la distancia tiene marcada
cualquier tipo de reforma

Ambos se apoyan en esa ventana
y miran al vacío
no pueden evitar el querer
sueñan con estar abajo
ahí donde sus promesas
se cumplirían
donde esos sueños jamás se apagarían

Ahora ella susurra en las noches
todo lo que el viento pueda atrapar
ese viento que viaja lejos
donde solo Él lo pueda escuchar

12/6/11

TENERTE ES INEXPLICABLE

David Guerra

Buscándote hasta en el más lejano de los rincones
me he dado cuenta de que eres imposible de olvidar
ni en las más lejanas  ocasiones,
tu personalidad, tu ser, es posible de ocultar
es de esta manera que te imploro hasta en mis oraciones,
suplicando que lo nuestro nunca tenga que cambiar.

El poderte tener no es una ilusión,
es para mí, algo más que cualquier oración,
destinada para cualquier petición de perdón,
el tenerte seria, curar mi lastimado corazón.

Tenerte seria consumar nuestro amor,
en el más cálido balcón
en un atardecer veraniego de naranja color,
uniendo nuestros cuerpos en el más apasionado calor.

La distancia es una trampa que atrapa y no libera
pero a hecho de nuestra relación un apretado lazo,
que hace fuerte nuestra quimera
la cual nos enloquece y nos deja con ganas de cosas más intensas que un abrazo.

Ni la claridad de la luna y las estrellas
Pueden igualar la luminosidad de tu sonrisa,
Sonrisa que alegra  al solo enunciarla
 Y causa alteración por ser sumisa.

Si las nubes fuesen palpables, se pudiesen comparar a la suavidad de tus labios
que al besar acaban con todos los tristes momentos
por ellos mi cuerpo sería capaz de hacerlo todo,
como viajar hasta el infinito por vos.

Hay mujer la existencia de tu ser
es un hecho que causa en mi un enorme placer,
espero que la distancia esto no haga desaparecer
ya que sin vos no podría en este mundo permanecer.

10/6/11

A LA QUE VUELA

Miguel Molina Díaz

Una lunática noche entre sus ojos
concebida ella mágica poética entera
la había conocido muy jóvenes ambos
y volaba desde entonces con fosforescencia.

Sentada en el balcón cantando
sentía ella las pesadas piedras estrellarse
contra su milagroso cuerpo con un solo tatuaje
pero sus manos locas de creatividad
incesantes pintaban esas rocas con hermosos colores
hasta que se volvían suaves.

A la lluvia la recibía bailando
porque decía que le llenaba de energía las venas
y su baile contenía ritualidades de estrellas
y lunas, al fin y al cabo es la que vuela.

La que vuela volaba muy alto
cuando nubes grises tapaban el cielo azul
y llegaba lejos ilusionada dulcemente ella.
Con sus ojos veía en lo que nos hemos convertido:
putas, mandarinas, arrechos ocasionales.

Sus lagrimas dulces, nunca saladas
(toda ella es dulce, su voz, sus sueños,
incluso su tristeza es fuente de ternura)
Y siempre encontraba la manera ella
de recargar las nubes grises con alegres colores
y fragancias dulces, similares a ella.

Adora observar la luna llena,
a veces es salvaje y fugaz, como toda loba
y sin embargo, la que vuela altísimo
a las libélulas con sus sencillas y suaves palabras
la armónica les enseñó a tocar.

Sus ojos pueden ver todo fosforescente a su paso:
las nubes, las miradas, sus propias alas.
Le gusta escribir, como toda mujer que inspira,
lo que su caja de seños le enseña.
Hasta sus pesadillas con dulces lágrimas frena.

Yo creo que estaba toda loca ella,
soñaba, volaba, a veces quería ser princesa.
Había visitado las estrellas en sus aventuras
y enloquecida les enseñó a bailar a las luciérnagas.

Es la única que cree en el amanecer de la luna
y lo espera bañada en su éxtasis lunático ella
como una hada de cuento fantástico para adultos,
siempre está ocupada recordando sus promesas.
Cuando era yo niño le escribía mis primeros poemas
y como ella volaba me rompió el corazón, ella.

A veces ella parece que es pintora
y cuando sus alas están cansadas de volar
un dragón morado de hielo, que no lanza fuego
la transporta a ella y sus infinitos colores,
pintando todo a su paso por el mundo, ella.

La que vuela lo hace por su necesidad de volar
es una necedad la de ella su vuelo
para no sentirse limitada ni a su mente
ni al espacio, soñando despierta ella
siempre, con su imaginación de bruja.

De la que vuela me quedan más que solo recuerdos
me enseñó que lo importante es lo esencial,
espero que en su cajita de sueños guarde mis versos
ya que la literatura nos enseñó a soñar.
Cuando voy a la playa siempre pienso en ella,
con sus alas, una vez mágica,
me llevó por el mar a volar.

6/6/11

MI PEQUEÑA NIÑA

Isabel Dávila Pereira


Sabes, hoy dibujo una pequeña niña
Está aprendiendo lentamente a caminar
Y aunque sus temores con una sonrisa los tiña
Lo único que necesita es llegar a volar

Aquella pequeña esperará
Con esperanza mira arriba al cielo
Recuerda que el sol aun brillará
No tiene porque sentir aquel hielo

El mundo aún da vueltas
La música acaricia sus oídos
Los pájaros aún vuelan
El tiempo camina por sus manos

Sabes, hoy la niña sonrió
Pensó que lo mejor sería soltarte
Hoy la niña a mi reflejo miró
Y observó que no se trata de olvidarte

La niña como el tiempo exigió, creció
Ya no puede gatear
Y la niña como el llanto reclamó, se derrumbó
Poco a poco se empieza a marear


Ahora soy yo la que está aquí
Ahora tomare el lugar de mi niña
Cometí miles de errores
A superarlos, no me complico por menores

Niña pequeñita
Sonríe, que el mundo aún gira
Niña chiquita
Sonríe, que el sol aún brilla

5/6/11

#1 Día

Pietro Marsetti

Luz de vida
apaga la obscuridad
nos quita luceros
dice que todo empieza de nuevo.

Facha azul, detalles blancos,
lámpara de fuego
marca el tiempo
nosotros nos regimos al mando.

¿Dónde se quedó tu fin?
Eres sin limites
durante medio tiempo.
Luego dejas caballero, que descanse la noche.

Día dame  mi sombra
dame quien acompañe y siga.
Mientras aventurado camino
el destino, lo vivo, tu lo iluminas,
él le da lo incierto .

Tenue de gris y terno largo.
Ocultas al sol para que no nos vea.
Compartes con los pequeños
tus días amargos.

Báñanos de agua, no queda más
que vivir a tus pies.
Báñanos que así la pena pasa
moja el infierno creado con cada paso en el suelo.

Día. Tu luz, sí me ilumina.
De toda la dicha me alimento
y florezco para pensarla
todo tu medio tiempo.

1/6/11

LA CALAVERA DEL CHE


Nela Martínez Espinosa

Geología de los sueños
la calavera del Che
desnuda de palabras
lo pone a volar de nuevo.

En aerolito sube
En candela baja

Viento de la historia
da vida a su osamenta
nos devuelve su luz caminante
desde el ayer de su paso
de cordillera y desierto
de dolor como selva y lava
por siglos congeladas.

Desde la edad del tiempo
desde la noche profunda
del antiguo mineral herido
le amanece a lo escondido
le renace a lo buscado
llanto tras llanto inacabado.
Llama es. En el aire se dispara.
Aire, ay, que no respira
y le silba en el pecho
ya sin asfixia.

A golpe de multitud alienta
multiplicado huracán
redoblado suspenso
del mundo entero
en suspiro tras la bala
rastreadora artera buscándolo.
Instante de la soledad
y de la sombra victoriosa.
Cortándole las manos
para nunca más la siembra.

Pero he aquí
en puro hueso
la elemental armadura
de su ser regresa.
Y nos deslumbra
como si la muerte no existiese

Como si jamás el miedo
en traje de general
hubiese temblado.
Guerrillero caído
su sonrisa de amor
en el alba de otro siglo
madruga al sol
de Ñancahuazú
cráter de su sentimiento
volcán de su pensamiento.
La mano que lo rescata
desata los nudos errantes
el cardo de los recuerdos
y todas sus espinas.
Desata la memoria
del primer fuego asesino.
Nos descubre todo el ayer
y en el corazón del hombre
la tierra herida
ya no es fragmento
de su propio esqueleto.
Piedra milenaria es
roca que se sostiene y crece
y transformará un día
la geografía del Ande.
Levanta la flor del futuro
desde la cordillera Bolívar.
Flor de las rebeliones
nos devuelve a la escuela
en donde como si diera
su primera lección
con la muerte por testigo
hace de la palabra
su verdad habitada.

Niños de América
la nuestra
la así nombrada.

Niños del hambre y del silencio
o de la voz amarga
en la escuela fue el crimen
y él antes de morir
les inventó el mañana.
Prisionero condenado ya
hizo del acento su pretexto
para que nadie nunca
soporte lo falso.
Signo traído al oído
en lengua de ayer
leyenda y pueblo
con voz antigua
ahora lo rezan.

Ante tanta ternura acumulada
con la que le desentierran
y lo entierran nuevamente
nos entran ganas de llorar
de decirle simplemente
como la que murió llamándolo
hijo a lo lejos, hijo
o mejor compañero.

Por siempre
Che de la esperanza
compañero.


* En reconocimiento a una de las mujeres fundamentales de nuestra historia, ejemplo de entrega, renunciamiento y perseverancia. A ti, Nela Martínez Espinosa, nuestro más profundo agradecimiento.