Ocaso de mil soles
que bañan de seda el alma
vertiéndola de esperanza
alimentando de fuerza su aura.
Noches de ver llena la luna
alumbrando más que la mañana.
Obscuridad de pasión, locas de locura
sedientas de tentación, hambrientas ternura.
Mañanas de descansó, voz floreciente.
piel irradia fuego, calor complaciente.
Pies descalzos , brindan apego.
Estrecharse los labios, saludo eterno.
Días sin fin, coloridos de vida
inundando de alegría cada paso.
Bordean de dicha la vida con abrazos.
El cuerpo físico siente ser abstracto.
Horas de locura, minutos de pasión.
Aventuras de cúspides largas, entrelazando manos,
caminantes por desiertos sin deseo de beber agua.
Vida, sentirla cuando se está contigo.
Vida para ser ajeno a la soledad.
Estrechos caminos, paisajes delgados,
calles que a veces se tornan angostas.
Lagunas de aguas con palabras impuras,
una ves disueltas, agua dulce sin amargura.
Semanas que no son largas,
se acorto el tiempo.
Desapareció con todos los males.
Se difumino con el viento.
Ocaso: Al verte frente al poeta de tus ojos.
Noche: Fantasías de desvelo entre tus curvas.
Mañanas: Levantarse como el sol, luminoso, sin amargura.
Días: Completos de armonía, deseoso de tu llegada. Felices de compañía.
Paraíso que no vive de un jardín como el edén.
Compartido, caminante deseoso del acompañante.
Aventura de los que son aventureros constantes.
Degustar de la esencia de tu magia.
Percibir el ambiente diferente,
volar en encantos con escucharte cerca.
Escribir sin lápiz, la dicha de mi alma.
Todas las noches apuntes de cada día de felicidad.
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